Sunday 25 November 2007

Historia moderna

Cuando escribí mi entrada sobre el Mossad busqué algunas fotos, de las de papel, para acompañar el texto. No las encontré. Me daba rabia haber perdido fotos antiguas y me puse a hacer una buena búsqueda por la casa.

No solo encontré las fotos de la campaña, algunas fotos más que ya no me acordaba que existían, sino tambien el siguiente tesoro:




Si señores (o señoras por mayoría): yo fui a ver los Ramones, la primera banda de punk, en 1990, hace 17 años. Eso es histórico, qué viejo ya soy. Ellos dieron su último concierto seis años después. En 2001 Joey Ramone se murió de un linfoma, en 2002 Dee Dee Ramone murió de una sobredosis de heroína y en 2004 Johnny Ramone se murió de cancer.

En 2005 salió una película sobre los Ramones y con la vista histórica los personajes parecen más complejos de lo que me parecieron en los cuarenta minutos de concierto, en los que tocaron treinta canciones, en Octubre de 1990. Joey practicaba Yoga y sólo comía comida orgánica, Dee Dee, el drogadicto del grupo, era el listo de la banda y Johnny era un gran fan de George W. Bush al que apoyó durante su campaña electoral.

Aquí las fotos que deberían acompañar mi entrada sobre el Mossad.



Para viajar sin dinero: marinero


Der Alte


Café en Jerusalen

Friday 23 November 2007

Fish Head Curry




Me gusta comer y me gusta descubrir y aprender. La consecuencia de la mezcla de mis gustos es que, no voy al McDonald's (o HerrWurst o DonPaella) cuando viajo pero a sitios donde sirven comida de la región.


En la época pre-navideña del año pasado fui a Singapur, una isla-país en Asia Pacífica de habitantes con una mezcla de orígenes: chinos, malayos, indios, árabes y europeos. Eso se refleja en la comida disponible que tiene fama de variada y buena.


Llego de Alemania nevada y decorada de navidades a los trópicos también decorados de navidades. El taxista me da consejos: 'tenga cuidado con las chicas guapas y agradables de manos grandes y voz profunda', antes de darme un discurso sobre las cárceles de su país, que también tienen mucha fama. Su favorita es 'Changi prison', fundada por los japoneses después de capturar la antigua colonia inglesa en 1942 y aumentada desde entonces, muy bonita dice. Su futbolista favorito es Beckenbauer, pero seguro que sólo lo dice porque soy alemán, pero entones no entiendo sus otros comentarios, no sé.



Al compañero con el que viajo, tambien alemán, le gusta la comida india. Cuando él esta hay que comer indio, da igual dónde (una vez pasamos una hora buscando un indio en Tokyo). Siempre pide demasiado y después de los entrantes empieza de quejarse de que no puede más. En Singapur fuimos al restaurante Muthu's Curry, recomendado por nuestros compañeros indios que nos acompañaban, uno de Bombay, el otro del mismo Singapur. Con tanta afición y conicimiento acabamos con la mesa llena de platos. La mayoría salsas en tono marrón con ingredientes no fáciles de identificar, pero el plato enfrente mío destacaba: me miraba fijamente a los ojos. ¿Cómo comerlo? He dicho que me gusta la comida exótica, ¿pero tanto? Además, un hombre bueno, con buena educación, no va a por todo a la primera, hay que conocerse poquito a poco, ¿no?


Probé la salsa y un poco del pescado pero le dejé los ojos, que me miraban con tanta intensidad, a mis compañeros. Igual la próxima vez acabo la faena.

Falta poco para navidades

Little India


Indian food

Holy cow









Tuesday 20 November 2007

¿Cómo empezar?


Escribir una entrada me lleva más tiempo del que me esperaba. La última la escribí en el trabajo durante un 'breve descanso', que al final fue más bien 'dejar el trabajo una hora antes de tiempo'.
Lo que más me lleva son las primeras frases y quizas las últimas, el medio va yendo una vez estoy en marcha.

Yo creo no soy el único con esta no-linearidad al escribir, las primeras y últimas frases de las buenas novelas suelen ser las mejores del texto. Estoy seguro que fueron pensadas durante horas o días.

Algunos ejemplos:

'Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo. '


'I raised my head. The offing was barred by a black bank of clouds, and the tranquil waterway leading to the uttermost ends of the earth flowed sombre under an overcast sky - seemed to lead into the heart of an immense darkness.'


'The first I heard of the beach was in Bangkok, on the Khao San Road. Khao San Road was backpacker land.'


'He lay flat on the brown, pine-needled floor of the forest, his chin on his folded arms, and high overhead the wind blew in the tops of the pine trees.'

'He fell in October 1918, on a day that was so still and quiet along the entire front line that the army despatches restricted themselves to the single sentence: that there was nothing new to report on the western front. He had sunk forward and was lying on the ground as if asleep. When they turned him over, you could see that he could not have suffered long - his face wore an expression that was composed that it looked as if he were almost happy that it had turned out that way.'


'So we beat on, boats against the current, borne back ceaselessly into the past.'


'Zugegeben: ich bin Insasse einer Heil- und Pflegeanstalt, mein Pfleger beobachtet mich, läßt mich kaum aus dem Auge; denn in der Tür ist ein Guckloch, und meines Pflegers Auge ist von jenem Braun, welches mich, den Blauäugigen, nicht durchschauen kann.'


'En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor.'


¿Quién puede decirme de dónde vienen estos extractos?

He escrito la entrada de hoy, ayer cuando mi mujer estaba en la Tupper-reunión mientras yo cuidaba de la peque. No me llevó mucho tiempo, el secreto es copiar y que otra gente trabaje.

Hielo

Khao San Road

Forest







Monday 19 November 2007

Integorratorio del Mossad

Trabajo con gente que viaja mucho y a lugares exóticos.

Cuando nos juntamos para las cenas, las historias viajeras siempre entran en la conversación. Dependiendo de las bebidas consumidas y del ambiente del sitio, las historias varían de nivel y de autencidad.

El uno cuenta cómo le paraban con su todo-terreno soldados en Nigeria cada dos por tres para pedirle dinero para dejarle seguir y no matarle en esta ocasión. Después de una temporada pagando se dio cuenta de que los soldados sólo tenían barricadas ambulantes, que montaban en la calle cuando veían venir a alguien que parecía tener dinero, y tampoco tenían vehículos. Entonces, dijo, a partir de este descubrimiento siempre conducía muy rápido, así no les daba tiempo a poner las barricadas ni a seguirle después de haber pasado. Fácil, valiente.

El otro cuenta que pasó una noche en Bangkok recogiendo pescados vivos tirados en las calles con su conductor de tuc-tuc. No sabe de dónde venían los pescados del medio de la calle pero después de haberse sumergido en la vida nocturna tailandesa tampoco le parecía raro. Su conductor estaba tan contento con la comida inesperada que no le cobró al llegar al hotel por su viaje.
(Nótese que la historia de este señor, en otro ambiente y con más bebidas, fácilmente la hubiesen protagonizado bolas de ping pong en vez de pescados.)

Las comidas es un tópico favorito , corazones de serpientes medio vivos en China, insectos en Indonesia, semen de pescados varios en Japón , pero eso es otro tema, que se tratará en otra entrada.

Mi historia de aventuras para ocasiones avanzadas es:




'Yo fui interrogado por el Mossad (servicio secreto israelí)'

Durante mi carrera hice una campaña en un barco de investigación en el Mar Rojo. Volé de Alemania a Eilat vía Tel Aviv y crucé la frontera Israel - Jordania en taxi a medianoche para llegar al barco que estaba esperándome en Aqaba. Durante las siguientes semanas fuimos rumbo a Haifa en el norte de Israel, parando brevemente en Duba (Arabia Saudí) y Safaga (Egipto), cruzando después el canal de Suez al Mediterráneo.

Mapa de operaciones

Después de llegar a Haifa aproveché que estaba en un país soleado y caliente en pleno Abril y me fui a Jerusalén, alojándome en el refugio armenio en el Via Crucis, que resultó una mala selección porque coincidí con la Semana Santa ortodoxa y a partir de las cinco de la mañana pasaban grupos rusos y griegos cargados de cruces, ensangrentados y cantando al pleno pulmón por mi ventana. Cogí el autobús a Tel Aviv, compartiendo mi viaje con un grupo de chicas soldados con apenas 18 años, que hubiese parecido a un viaje de colegio si no todas hubiesen tenidos rifles de asalto M16 (conocidos gracias a las peliculas americanas).


El canal de Suez



Egipto visto del canal de Suez

Llegado al aeropuerto me dirigí a facturar y desde ahí todo fue cuesta abajo. El señor vio mi pasaporte con tres visas árabes en las últimas cuatro semanas y el sello de inmigracíon de Haifa indicando que venía en un barco alemán. En vez de preguntarme si prefería ventana o pasillo me llevó a una habitación sin ventana alguna. En la siguiente hora (o dos, dependiendo de la ocasión en la que cuento la historia) tuve que casi desnudarme (ya tenía en mente la imagen de un policía poniéndose guantes de goma, pero no llegamos ahí) y fui cacheado antes de ser interrogado por tres (o más...ya sabes) personas a la vez, que seguro que trabajaban para la seguridad del aeropuerto, pero el Mossad suena mejor (en cualquier ocasión). Fue interesante ver cómo hicieron el interrogatorio. La idea era hacerte preguntas muy específicas, como los detalles de mi trabajo en el barco, para después cambiar de tema por completo para de repente volver al primer tema. Así, cuando las respuestas la segunda vez eran diferentes a la primera te cogen, ¡bingo! Tambien los protagonistas tenían diferentes papeles en plan 'poli bueno, poli malo', también conocido gracias a las películas americanas, para ponerme nervioso con los unos y coger confianza con los otros. Al final decidieron que no era una amenaza para el aeropuerto (o Isreal en general) y me dejaron ir. De hecho me llevaron directamente a la puerta de embarque, si no hubiese perdido mi vuelo, e incluso se despedieron agradablemente.

(Al final, tenía un asiento al lado de la ventana, aunque prefiero pasillo.)

Sunday 18 November 2007

Volkstrauertag - ¿Por qué no te callas?

Windhoek, monumento a los caídos alemanes

El jueves vinieron dos señores a nuestra casa a pedir dinero.
Pedían para una organización llamada Volksbund Deutsche Kriegsgräberfürsorge (VDK) que se dedica a mantener tumbas de caídos, no sólo de alemanes sino también de extranjeros tanto en Alemania como en el extranjero.
Debido a nuestra historia del siglo pasado casi todas las familias alemanas tienen un caído en algún lugar del mundo. Para que no se olvide la historia ni a sus protagonistas los voluntarios del VDK se dedican a identificar caídos y darles un funeral, un tratamiento digno y un lugar donde se les pueda conmemorar en el Volkstrauertag, el día de luto nacional, que es hoy.
En el cementerio de mi pueblo natal hay un monumento a los caídos de las guerras y al lado alguien ha puesto la lápida de un hombre africano que murió en 1913 en este pueblo de apenas doscientos habitantes. No sé la historia de este hombre pero siempre imaginé que lo trajeron desde Namibia, la antigua colonia alemana en Africa, al lugar donde habría de morir. Me acordé de esta lápida cuando visité el monumento de los caídos alemanes en Windhoek, la capital de Namibia, hace años.
Hoy, con el dinero recaudado, alguien va a poner flores en la lápida africana en el frío norte de Alemania y en el monumento alemán del cálido sureste africano.

El frio norte de Alemania


El cálido sureste africano

En otro lugar del mundo, en el continente antigua colonia de España, el rey dijo la siguiente frase a un cabeza de estado: '¿Por qué no te callas?'
Esta misma frase tambien la oía siempre como respuesta una señora de una aldea en Galicia, que vi en un documental de la televisión alemana el otro día, cuando preguntaba por el destino de su hermano, fusilado durante la Guerra Civil Española. Sesenta y ocho años después de su muerte por fin han excavado la fosa común escondida al lado de la Iglesia que, como buena católica, atendía la señora cada semana, y han idenficado a su hermano en la tibia aldea gallega.

La tibia Galicia